Tener una edad en la que las habilidades físicas de uno permanecen reducidas es un reto todavía más enorme y más estresante que una mudanza habitual.
Bastantes personas mayores deciden dejar sus domicilios de por vida para vivir en una residencia, donde tienen la posibilidad de recibir atención adicional para vivir sus últimos años con los cuidados que requieren.
Otros deciden minimizar la magnitud de su hogar trasladándose a uno más diminuto para simplificar su historia, en años donde las complejidades innecesarias tienen la posibilidad de transformarse en enormes molestias.
Aquí te damos algunos consejos para hacerlo de manera cómoda y que no les afecte.
Empieza a hablar con ellos sobre la mudanza cuanto antes
Mientras se acerca la necesidad de cambiar de hogar, los adultos mayores se muestran menos inclinados a hablar de eso. Es fundamental asegurarse de que los adultos mayores no se cierran por completo a la probabilidad de mudarse.
Mientras avanza la fecha de la mudanza, los ancianos se preocupan de que logren verse forzados a tomar una elección en oposición a su voluntad, o tienen la posibilidad de permanecer psicológicamente incapacitados para tomar una elección que sea más correcta para sus propios intereses.
Por dicha razón, hablar cuanto antes sobre el traslado os ayudará a los dos a llegar a un pacto anterior a que llegue esa fecha límite en la que van a tener que mudarse.
Si se lo mencionas con una semana de anticipación, posiblemente se encuentre tan cerrado a la probabilidad por ser tan cercana que no conseguirás nada más que empeorar el problema.
Debemos ser conscientes de que una persona más grande no es posiblemente capaz de desplazar por sí misma la mayor parte de las cajas de la mudanza, ni siquiera las más ligeras. En algunas ocasiones, ni siquiera es viable pedirle que las haya metido en cajas.
En estos casos lo mejor es darles la posibilidad de confiar en la ayuda y el apoyo de un familiar que vaya empaquetando cada una de sus pertenencias en cajas, esta podría ser la opción ideal.
Las mudanzas son una actividad pesada en sí y, reubicar a un ser preciado que ya está en el club de los años dorados, tiene sus propios retos.
Factores para tener en cuenta para una mudanza con adultos mayores
- Su salud no le posibilita vivir de manera libre: Y aún más si tiene inconvenientes auditivos, visuales o no puede caminar.
- Su vivienda le queda bastante grande, habitaciones sin utilizar, un jardín que por el momento no puede atender y una vivienda que no puede conservar limpia por sí mismo.
- Sus parientes viven bastante lejos: Por tradición, es regular visitar la vivienda de los abuelos para pasar las fiestas. Sin embargo, es mejor conservar a nuestros propios seres queridos más cerca. Para compartir con ellos y observar su salud.
- Escaleras: Los adultos mayores pierden percepción de hondura en vista y oídos. Vitales para la igualdad y, si el piso tiene escaleras, se convierte en un elemento de peligro de accidentes graves.
- Seguridad: Los adultos mayores que viven solos son más vulnerables a robos o accidentes en sus domicilios. Si habita en una región en la que ha incrementado la delincuencia, la mudanza de tu familiar en la tercera edad se torna una prioridad.
Consejos para mudarte con adultos mayores de manera cómoda
Ordenar una mudanza con una persona en la tercera edad no es simple. Por esa razón te traemos consejos para que logres este objetivo sin estrés:
Encargar responsabilidades de mudanza
Bastantes personas pasan su historia coleccionando posesiones relevantes. Por esa razón, una mudanza en la tercera edad se vuelve complicada, más todavía si es a un lugar más diminuto.
Es recomendable que regale los artículos que tengan menos valor sentimental. Es más simple una vez que se distribuyen entre parientes, vecinos y amigos y sentirá una grata sensación de generosidad.
Ayúdale a clasificar los artículos que vaya a llevarse y cuáles va a regalar, ofreciendo cambios con mucho tacto. A los adultos mayores no les gusta sentirse inútiles, empero a la vez anhelan controlar la situación.
Planifica el transporte cerca de las necesidades de tu ser amado
Varios adultos no aguantan un viaje extenso sin ayuda y ciertos tienen la posibilidad de solicitar transporte médico de servicio completo.
Un viaje corto en carretera puede extenderse con las constantes paradas para ir al baño o estirar las extremidades, pillar un bocadillo o pasear.
De esta forma que cuenta con suficiente tiempo para que no interrumpa otras ocupaciones relevantes.
Si necesitas volar, aspira reservar vuelos sin escalas –o las menores posibles- y comunícate con antelación con la aerolínea para informarte si poseen servicios de ayuda para adultos mayores.
Ejecuta un chequeo médico previo a hacer la mudanza
Es recomendable, antes de hacer una mudanza en la tercera edad, hacer un chequeo médico completo. Esto determinará el estado físico de tu pariente, si está en condiciones para un viaje extenso sin ayuda o si requerirá transporte médico.
Además, es fundamental actualizar las recetas médicas y comunicarte con su distribuidor de seguros y sus doctores para notificar la mudanza.
Obviamente, una vez en su nueva localización, es imprescindible hacer los trámites necesarios de censo y el ambulatorio que le corresponda.
Explica las ventajas del nuevo hogar a tu ser preciado
Una vez que alguien ha vivido a lo largo de décadas en un mismo sitio, resulta nostálgico dejar atrás todo. Para animarle en la transición recuérdales los beneficios que obtendrán en su nuevo hogar:
Concéntrate en los puntos positivos. ¿Cambio de localidad al campo o costa? Pasea al lado de ellos para que exploren el ámbito. Esto disminuirá la tensión de la mudanza.
Permiteles que vuelvan a producir sus propias rutinas: Pasear por las tardes, visitar misa, encontrando sitios adecuados para eso.
Haz que su nueva localización sea como su hogar
No hay nada como el hogar. Para facilitar el proceso de mudanza en la tercera edad haz esto:
Ordena sus objetos del modo más semejante posible a cómo los poseía en su viejo hogar. Te aconsejamos que saques fotos antes de comenzar la mudanza para que sea más simple.
Si la vivienda está en obras o reformas, pídele que participe en la idealización del espacio.
Finalmente, siguiendo estos consejos te será mucho más fácil hacer la mudanza con ese adulto mayor de tu familia. Se sentirá cómodo en el proceso y alegre en el nuevo destino.